LO QUE VIENE TRAS LA VENIDA

Quiero contarles una historia verídica -porque como ya saben, todos los temas que aquí se tratan, tienen un origen. Alguien preguntó, alguien mandó una anécdota, en fin… a alguien le pasó. De eso se trata, de lo que a todas nos pasa alguna vez-. A la protagonista le pondremos de nombre Anastasia -sí, así como la de las Sombras de Grey-. Estaba Anastasia haciéndole una felación a su hombre -un oral, un blowjob, como quieran llamarle-, y llegó al momento que buscamos siempre, la dulce venida -que ojalá fuese dulce de verdad-; se tragó lo que había que tragarse, pero ella siguió.

Para quienes no sepan, después de eyacular el miembro queda muy sensible, más que antes. Pero existen dos opciones si se sigue estimulando -según sé-. Una es que le incomode, y otra es que le guste al grado de continuar la erección -sí, esto último no es un mito, algunos hombres pueden continuar una erección aún después de eyacular sin descanso alguno, pero ese es tema para otro post-.
En fin, Anastasia siguió… aunque él le pidió que parara; porque, como les decía, el asunto se pone sensible, una mezcla de incómodo y rico -me han dicho-. Y sí, tiene una explicación, y es que después de eyacular, dan ganas de orinar. Cosa completamente normal por la presión en la vejiga y la sensibilidad extrema en la punta del pene. Conclusión: si se sigue estimulando… algo que puede pasar, es que se orine.

Se puede, ha pasado, y a Anastasia le pasó. Cabe mencionar que, -cuenta la leyenda- si empiezas a orinar es difícil detenerlo hasta que termines. Se imaginarán entonces que ella tuvo una golden shower accidental, en la boca, en la cara, en todos lados… Así es, real no fake. Y sí, es algo que le puede pasar a hombres y mujeres. ¿Es eso el famoso squirt? No, no es. Pero por ahí va la cosa. -tema para otro post, también-.

Photo: Jean Philippe Piter

Y esta es la parte del texto en la que les digo dos cosas que siempre deben recordar cuando se trata de sexo: Nada es general. Y, Nada es como en el porno.

Cada persona reacciona diferente ante ciertos estímulos, y personas. No solo no te sentirás igual que los demás, sino que SÍ depende de con quién estés.
No hay reglas que deban aplicarnos a todos. No hay algo que deba gustarnos a todos. Dejemos de generalizar, porque aprender y vivir cosas nuevas con cada pareja sexual, es parte del sexo satisfactorio. Por eso se recomienda siempre experimentar, probar cosas nuevas. No es por lujuria, es porque nunca sabes que podrá pasar.
Y si de ganas de orinar se trata, no es penoso decirlo, de hecho, habiendo leído esta historia, es mejor, porque a menos que tengan fetiche con la orina, lo que puede pasar no les gustará mucho.


NOTA MENTAL: -aunque no vaya por la línea exacta del tema- Mujeres, orinar después de la relación sexual NO FUNCIONA como método anticonceptivo. Les sorprendería cuántas han creído que sí -y a mí me sorprendió la cantidad de comentarios y dudas al respecto en internet-. NO, no tiene nada que ver. Orinar no es sinónimo de que el semen salga del cuerpo. Completamente FALSO. Fin de la nota mental.

Sin pena, digan las cosas, pregunten, averigüen. Lo que te parece extraño puede estarle pasando a tu amiga también. Porque al final, todas hacemos…

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